Después de la introducción de nuevas normativas en Austria para promover la reutilización de materiales de construcción y demolición, la organización Repanet, que aglutina a las empresas del sector social austriaco, ha puesto en marcha el proyecto Baukarussell, una iniciativa piloto para ayudar a desarrollar un mercado para estos materiales.
Los principales retos para Repanet y las otras cinco organizaciones nacionales asociadas en el proyecto serán casar la disponibilidad de estos materiales con la demanda, a ser posible sin necesidad de un almacenamiento intermedio, en un modelo conocido como ‘Building to Building (B2B)’.
El consorcio del proyecto tiene como objetivo fomentar que los propietarios de grandes edificios incluyan la reutilización de residuos en su construcción y deconstrucción.
Como uno de los países pioneros en Europa, Austria introdujo en enero de 2016 una regulación para apoyar la reutilización de los residuos de construcción y demolición (RCD). La normativa sobre reciclado de estos materiales introdujo requisitos en los procesos de construcción y demolición que promueven la reutilización y el reciclado de los RCD, así como la demolición orientada a la recuperación y el desmontaje selectivo obligatorio de los componentes reutilizables presentes en los edificios antes de su demolición.
El nuevo reglamento también añade claridad a los criterios de fin de la condición de residuo de materiales de construcción y demolición.
Precisamente, Austria fue mencionado recientemente como un ejemplo de buenas prácticas en las nuevas directrices para el reciclaje y la reutilización de residuos de construcción y demolición de la Comisión Europea.
La organización europea RREUSE ha propuesto en este sentido la implantación de requisitos similares para pedir que las auditorías previas a los derribos y la demolición selectiva se incluyan en la Directiva marco de residuos, ya que alrededor de una cuarta parte de los residuos generados corresponden a esta categoría.